(18.04.85)
Temas:
1.
¿Qué
es la sanación?
2.
¿Cómo
sanar con la ayuda de los Maestros?
3.
La
importancia de enseñar a los demás
4.
Sean
los portadores de la Flama Divina, sensibilizando a las personas sobre las
verdades espirituales
5.
Las
causas ocultas de los enfermos mentales
6.
Consejos
para los sanadores
Pregunta: esta
noche nos reunimos para consultarlo sobre todo en el aspecto de la sanación. Se nos explicó que trabajando en lugares que serían consagrados, un grupo
de colaboradores podría ser formado para transmitir energías, ya sea en el campo de la sanación
o ya sea para ayudar a las personas en diversos problemas.
La pregunta general es: los miembros que conformamos el grupo en esta sala estamos dispuestos a tratar de ayudar y en ese sentido:
¿Qué podemos hacer? ¿Cómo debemos organizarnos?
La pregunta general es: los miembros que conformamos el grupo en esta sala estamos dispuestos a tratar de ayudar y en ese sentido:
¿Qué podemos hacer? ¿Cómo debemos organizarnos?
Antes de comenzar con mi explicación quisiera saludarlos a todos, y antes de responder a la pregunta que me hacen, quiero primero explicarles lo que es la sanación, ya que antes de querer volverse un sanador, primero deben de saber qué es lo que significa sanar.
1. ¿QUÉ ES LA SANACIÓN?
La
humanidad padece de varios males y la sanación consiste justamente en curar esos males que padece
la humanidad, pero:
¿Cuáles son los males que afligen a la humanidad?
Y
si se responde a esa pregunta, entonces también respondemos a la pregunta y
enigma:
¿Qué es la humanidad?
Porque
dependiendo de lo que ustedes son, los males son equivalentes. Y así por ejemplo, si fueran únicamente constituidos de electricidad,
la única enfermedad que podría afectarlos sería la de tener un cortocircuito. En cambio, si
fueran formados de tierra, la única enfermedad que podrían tener sería la de padecer una inundación o una sequía. Y si fueran una nube, la única enfermedad que podrían endurar sería que desaparecieran y
nunca más volvieran a reaparecer.
Por
lo tanto, al mismo tiempo que tratan de proporcionar ayuda en el cuerpo, en la
mente o en el alma de las personas (y sin importar cual sea su motivación) no se
alejen jamás de la piedra primordial que es el conocimiento de sí mismo, el conocimiento
del otro y el conocimiento de su situación exacta.
¿Por qué no podemos
separar el conocimiento del acto de sanación?
Porque
si separamos la sanación del conocimiento del otro, o sea de lo que él es en su
naturaleza oculta, de la condición en la que se encuentran sus diferentes cuerpos que lo constituyen (o sea su cuerpo físico, pero también su cuerpo astral, su cuerpo energético, etc.), de lo que es su evolución cósmica y donde se encuentra actualmente en esa evolución.
Y puesto que vive en el planeta Tierra, también saber lo que es la Tierra y en
qué nivel de evolución se encuentra la Tierra.
Si
se disocia todo ese conocimiento del acto de sanación, entonces el acto de
sanación ya no es verdaderamente un acto de curación, sino que se vuelve un acto de ignorancia que intenta, con
cierta exaltación emocional, de llevarle ayuda a otra persona que está aún más cegada por
la ignorancia. Pero el único que pueda llevar a un ciego (como se ha
dicho) fuera de las tinieblas, no es otro ser bien intencionado, pero que está igual
de ciego, sino aquel que tiene una antorcha, o una linterna, o que es la Luz misma.
Y es
por eso que varias veces les he dicho que sin importar cuál sea la obra que
quieran llevar a cabo para ayudar a la humanidad, tienen siempre que hacer esa obra en
conexión con la Jerarquía Blanca o con el Maestro que le interesa, porque si al
extremo de su labor, no hay una fuente de Luz, una fuente de Conocimiento y una
fuente de Energía, entonces no van a poder hacer nada que realmente sea un beneficio
para los demás o para ustedes mismos y se desesperarán porque no habrá fruto.
¿Por qué no habrá
fruto en ese árbol que intentan hacer crecer?
Debido
a que no ha recibido agua. Ahora bien,
¿Cuál es la única agua del Cielo?
La
Luz, la Bendición, la Energía divina, no importa las palabras, no importa la imagen.
Lo
que se necesita por lo tanto es que le den la mano a aquellos que se encuentran más elevados, porque se
trata de un problema energético. No tiene nada que ver con el hecho de que ustedes
sean “inferiores” y nosotros “superiores”. No es para nada eso. No es una servidumbre lo que les pedimos. Lo que les solicitamos es que durante todavía un
tiempo, nos den la mano como lo han estado haciendo durante miles de años.
Porque
se trata de un fenómeno vibratorio, y es por eso que aún no tienen el poder energético para realizar
todas las materializaciones, todos los milagros y todas las proezas que se les han
prometido y que por el momento esa capacidad se encuentra todavía dormida en ustedes.
¿Por qué esas cosas
no pueden ser manifestadas, aunque sus anhelos o su fe estén exaltados para ayudar
a los demás y para salvar al mundo?
Porque
aunque incluso si el corazón los empujara, su sacrificio no serviría de mucho,
ya que como se los expliqué, se trata de un problema vibratorio, de un problema
energético, de un problema de preparación. Y seguramente ahora se preguntarán:
¿Cómo se adquiere esta preparación, por qué sistema, por qué ascesis?
¡Para así yo también poder obtenerla!
Desafortunadamente, ese
ascetismo no es del mundo físico sino del mundo del espíritu, y es por ello que
cada vez que converso con ustedes, siempre trato de despertar en vuestro interior la Flama divina.
2. ¿CÓMO SANAR CON LA AYUDA DE LOS MAESTROS?
«
Gran hermano, lo hemos pensado y venimos a ofrecerte nuestras manos para sanar. Tú
sólo tienes que venir y utilizarnos como instrumentos para
transmitir la energía divina a través de nosotros para así curar a los enfermos y así todo
el mundo estará contento. »
Por
supuesto, no es exactamente lo que pensaron, pero en sus esperanzas, es la
imagen que surgió en sus mentes, porque es su parte emotiva la que ha sido suscitada.
Ahora
bien, cuando deseen sanar a los demás, lo primero que deben de tener en su interior es justamente
todo lo contrario. Deben de adquirir una forma de dureza para saber aceptar cuando el otro tiene
que sufrir, porque no se puede o no se debe curar por razones kármicas.
¿Y es con el corazón
todo exaltado que me presentan esta noche que ustedes creen que van a poder aceptar
esa ley?
No.
Me acusarán de no haber sanado a tal paciente y que por mi culpa murió. Eso es lo que
me dirán si no aprenden primero a obrar como los Maestros obran y a curar como los
Maestros lo hacen. Lo que no significa que se vuelvan insensibles.
¿Ustedes creen que porque estamos “allá
arriba” somos insensibles a vuestro dolor?
Los
vemos sufrir, los vemos llorar, los vemos incluso pudriéndose en sus cuerpos mientras que el
alma todavía se encuentra al interior.
¿CREEN QUE ESO NOS GUSTE?
¿Creen que nos
procure alguna alegría dejar que las cosas sigan así?
El humano es un ser maravilloso, pero la actual etapa de su evolución lo ha vuelto
un estudiante difícil de guiar, y cuando se pone el peso del karma que se genera la
humanidad frente al peso de la Verdad divina (que es toda luz y toda ligereza), la Verdad
divina no puede contrarrestar el peso kármico de la humanidad que esta produce con sus bajas pasiones, sus
miedos y su egoísmo. Y por lo tanto, es necesario que el
hombre elimine todo eso para que se vuelva tan ligero y luminoso como lo es la Verdad divina.
¿Y la enfermedad qué
viene a hacer en todo eso?
Pues
justamente, la enfermedad, para muchos, son las escorias que la Ley divina viene a
quitar alrededor de ustedes, para que ustedes se vuelvan como lo es la Verdad divina, o sea: LUZ
Ahora bien, es cierto que no todas las enfermedades tienen este origen kármico y que muchas enfermedades se deben también a la ignorancia de los humanos para interactuar de manera armoniosa con su vida y con su planeta. Eso lo reconozco. Pero no debemos
de olvidar que en la masa humana, la enfermedad también quiere decir en gran medida karma y
por lo tanto: el pago de una deuda. Y con
esto, no quiero decir que el karma no deba ser aliviado y acortado, para que el
karma se vuelva algo útil y permita una toma de consciencia por parte
de la persona, sin que esta sea una prueba demasiado difícil de soportar. Y para eso están los Maestros y también los guías y todos los que sirven a la humanidad de algún modo,
pero no debemos nunca olvidar que la Ley va primero.
¿JESÚS VINO Y QUÉ
HIZO?
Él
curó, cierto. ¿Pero curó sin parar como su poder se lo permitía?
¿Curó
a todos los leprosos?
¿Curó
a todos los ciegos?
¿Resucitó
a todos los muertos?
No.
Pero lo hizo para demostrar que hay algo más precioso que la sanación, más
precioso incluso que la vida misma en la tierra, y es la Verdad, que es la Realidad del
hombre en su esencia. No hay que olvidar los testimonios que se han dado en el
pasado y utilizarlos para instruirse.
(Por
eso Jesús dijo: “Si no hago las obras de mi Padre, no me creáis. Más si
las hago, aunque no me creáis a mí, creed a las obras, para que conozcáis y
creáis que el Padre está en mí y yo en el Padre.” [Juan 10:37-38]
Porque a través de sus milagros, Jesús mostró lo que puede lograr el ser humano cuando llega a unirse con “Dios” (el Padre, el Cristo, Atma, el Espíritu superior, la Conciencia divina de la creación, llámenlo como quieran). El hombre se vuelve entonces un ser divino, un “dios humano”. Y todos los humanos tienen esa potencialidad de volverse como Jesús y ese es el objetivo de la evolución.)
Porque a través de sus milagros, Jesús mostró lo que puede lograr el ser humano cuando llega a unirse con “Dios” (el Padre, el Cristo, Atma, el Espíritu superior, la Conciencia divina de la creación, llámenlo como quieran). El hombre se vuelve entonces un ser divino, un “dios humano”. Y todos los humanos tienen esa potencialidad de volverse como Jesús y ese es el objetivo de la evolución.)
Sanar
como ustedes lo entienden, es naturalmente muy hermoso, es muy noble de su
parte, y para nosotros también es una muy buena cosa que de poder actuar a través
de ustedes. Pero no queremos que nuestra luz, que nuestra voz, que nuestro
poder, que nuestra energía, sean desnaturalizadas por la emotividad desconocedora que hay en ustedes. Y si un día, yo no levo mis manos para aquel
que viene rastreándose y que se está muriendo, no deben de preguntarme: ¿Por
qué? No me lo reprochen. Tengo Leyes que
respetar.
(Y es que el karma que se puede resumir en: “lo que hagas se te regresará”, puede por momentos parecer muy duro, pero es una ley tan importante como lo es la ley de
gravitación para mantener el equilibrio y la existencia misma del
Universo.)
Yo
no soy un orador, tampoco soy un sanador. Soy un portador de la Flama. Por lo
tanto, si han comprendido mi naturaleza, también entenderán que tienen que hacer con
ella, con nuestra naturaleza puesto que no soy el único, ya que todos los Hermanos actuarán igual. Así que no esperen que sea como un interruptor
que se enciende y se apaga, y cuando se enciende hace bajar la energía divina sobre todos
los enfermos de la Tierra o sobre todos los pacientes que tengan.
No
Al
trabajar conmigo, tendrán que trabajar con la Ley, trabajar con la Verdad y con
las exigencias de la Verdad. Obviamente, eso requiere una estructura diferente
y requiere una organización diferente a la que un grupo de curación tradicional
podría elaborar.
Entonces si
quieren nuestra colaboración, lo que van a formar no es un grupo de sanación “normal”, o sea un grupo de curación
de brazos rotos o de pobres almas en perdición. Sino que ustedes
van a obrar como lo hacemos nosotros, ustedes van a obrar como lo hizo Jesús.
Acuérdense
de él y me comprenderán. No es que yo sea su igual, pero busco a hacer a
semejanza de lo que se hizo en más grande, por uno de los más grandes, y ustedes
también deben hacer lo mismo.
¿Vino Jesús como el gran
sanador del mundo?
No. Él vino como el gran redentor del mundo y es por eso que dijo:
“Yo soy la luz del
mundo, yo soy el camino. Crean en mí, síganme e irán al Padre frente a mí.”
Por
lo tanto, no hay que gastar energía tratando de construir algo para curar. No. Jesús mismo no lo hizo.
¿En cambio qué fue lo que dio?
No
quiero hacerlos caminar sobre un camino erróneo. No, nunca les haré hacer un
solo paso falso. Y si a veces las decisiones tomadas, o las respuestas
contestadas, o las enseñanzas dadas parecen ser un poco duras, se debe porque
ante todo está la Ley, y por lo tanto no es el aspecto emocional que nos guía, sino
la sabiduría, ya que con el puro emocional no se puede ir muy lejos, debido a que es una impotencia.
Para
volver a la estructura del grupo, como se los mencioné: más que un grupo de sanadores,
piensen sobre todo en ser un grupo de portadores de la Flama Divina (como lo hacemos nosotros). Y consideren en primer lugar sensibilizar a las personas creándoles conciencia
sobre las realidades espirituales.
(Como
dice el proverbio: “Si le das un pescado a un pobre, comerá un día, pero si le
enseñas a pescar, no volverá a tener hambre”. Igual aquí, si curan a un
enfermo, estará bien un cierto tiempo, aunque debido a su ignorancia sobre las
leyes ocultas del Universo, es probable que vuelva a sucumbir, pero si le
enseñas a estar en armonía con la Creación, ya no volverá a recaer en la desdicha.)
No
se puede establecer un centro de sanación y como hacen los médicos, poner una
pequeña placa a la entrada que diga:
“ GABINETE DE CURACIÓN EN NOMBRE DE CRISTO ”
(Risas
de la audiencia)
Lo
digo para aligerar un poco la vibración de esta noche, que está algo densa por este asunto tan serio. Y luego esperar a
que el primer “cliente” llegue, y luego el segundo, y luego el tercero, etc.
Ustedes no pueden hacer eso.
¿Qué pasaría?
Ustedes
van a curar a algunos, pero otros, con seguridad, no los curarán, y sin embargo
pasaron a su alrededor, pero ustedes sólo tenía “una probable sanación” que
ofrecer, mientras que hubieran podido darles algo más valioso que la esperanza
de ser curados. Me refiero que ustedes hubieran podido aportarles la Luz.
Por
lo tanto, lo que hay que poner como piedra angular, como pilar para la acción, es que más que sanadores, ustedes sean
sobre todo los portadores de la Flama Divina, los Apóstoles de los tiempos modernos.
Eso es lo
que les propongo y no tengan miedo de hacerlo.
¿CÓMO HACERLO?
En
primer lugar, es necesario que trabajen juntos. Es decir que antes de que esa
masa de gente llegue a ustedes para pedirles que realicen todo tipo de
reparaciones en ellos. Primero ustedes deben aprender a conocerse, pero no a
conocerse como amigos, sino a conocerse como hermanos.
Lo primero que se debe efectuar cuando se quiere trabajar
con nosotros, es la formación de una fraternidad, ya que la amistad emocional no tiene
cabida en estas cosas, porque un día “me caes bien”, dice uno, y al otro día “ya
no me agradas más”.
Y mientras tanto, nuestra colaboración es constantemente sacudida por el vaivén de sus estados de ánimo, de sus apreciaciones, que un día son afectuosas y al día siguiente ya no.
Y mientras tanto, nuestra colaboración es constantemente sacudida por el vaivén de sus estados de ánimo, de sus apreciaciones, que un día son afectuosas y al día siguiente ya no.
Por lo tanto, la
colaboración con nosotros no se puede fundar en base a una “reunión amistosa”, ya que nada bueno, durable y funcional puede crearse, si la base humana que la
compone, si el equipo de trabajo que se reúne, lo hace llevado por una gran
exaltación de esperanza (“¡Vamos a hacer cosas maravillosas!”) o por una
amistad emocional (“¡Vamos a ayudar juntos!”). La razón es porque los humanos
son volubles. Un día se quieren y al otro día ya no. Un día ellos están de
acuerdo y al otro día ya no lo están. Un día creen y al otro día ya no creen. Y las cosas no pueden funcionar así. Por consiguiente se requiere otro fundamento
para formar ese templo. Y esa fundación solida y neutral es la Fraternidad.
(Esto
también es válido cuando laboran en forma individual. Así por ejemplo, yo me
comprometí a difundir la enseñanza de los Maestros y voy a esforzarme en hacer bien
esa labor aunque la vida me siga dando golpes, o que los Maestro no se me
aparezcan, o que a cada rato ya esté harto de escribir, o que reciba
comentarios negativos, etc. A veces me
falla la tenacidad, pero me esfuerzo en volver a enfocarme. Y si les digo esto
no es para presumir, sino para explicarles que hay que esforzarse en ser
responsables.
Si quieren evolucionar, la mejor manera es ayudando a transmitir la Luz, pero una ayuda fluctuante sacudida por nuestros estados de ánimo no es muy efectiva, por lo tanto, en la medida de sus posibilidades, comprométanse. Tal vez, ser portadores de una gran antorcha lo sientan muy pesado y prefieran mejor portar una pequeña vela, pero aún así comprométanse a no dejar que la flama se apague.
Si quieren evolucionar, la mejor manera es ayudando a transmitir la Luz, pero una ayuda fluctuante sacudida por nuestros estados de ánimo no es muy efectiva, por lo tanto, en la medida de sus posibilidades, comprométanse. Tal vez, ser portadores de una gran antorcha lo sientan muy pesado y prefieran mejor portar una pequeña vela, pero aún así comprométanse a no dejar que la flama se apague.
3. LA IMPORTANCIA DE ENSEÑAR A LOS DEMÁS
Si de verdad quieren ayudar al mundo, más que mitigar el sufrimiento de la gente, consideren primero en ser los portadores de la Flama Divina, los portadores de la Luz, concientizando a las personas sobre las verdades espirituales.
Ustedes
pueden hacerlo transmitiendo los mensajes de los Maestros de Sabiduría que los
sensibilizaron a ustedes, o transmitiendo vuestro propio mensaje a partir de esa
experiencia. Yo no quiero que sea absolutamente mi voz o mis palabras las que sean
escuchadas. Si ustedes transmiten la esencia de la enseñanza con sus propias
palabras será también muy bien.
De
todas maneras, mis palabras pueden hacerlas suyas y decir que son suyas, porque
lo son, ya que yo se las doy, les pertenecen. Es la linterna que les ofrezco
para que vayan a iluminar a los demás que siguen en la oscuridad.
Algunos me objetarán:
-
“Pero yo no soy lo suficientemente grande
como para transmitir esas enseñanzas y además todavía no he comprendido todo. Si
me hacen preguntas, muchas no sabré contestarlas.”
Y te respondo: ¡Basta! Ya no digas eso. No
pienses así. Ten fe.
(En
el libro La Respuesta del Ángel,
cuando Lili le preguntó: “¿Es que recibiré ayuda en mi trabajo o debo comenzar
yo mismo?” El Ángel le respondió: “Si lo
comienzas tú mismo, recibes la ayuda.” Conversación
4)
Ustedes
no pueden, evidentemente, de la noche a la mañana, declararse Adeptos de la
Jerarquía y en algún momento van a sentirse muy pequeños, muy ignorantes. (Es
muy cierto, snif)
Entonces, ¿qué va a
pasar?
Por
temor, ustedes no dirán nada, mientras que a su alrededor la humanidad está agonizando
debido a su ignorancia. Esa NO es la manera de proceder. No hay que tener
miedo. El temor es un gran obstáculo.
Ustedes
son gente de fe, gente con amor, personas que quieren ayudar, que quieren
salvar a los demás. Ustedes creen en los Maestros, en el Cristo, en la Vida Cósmica, además
ya tiene cierto conocimiento.
¿Qué más requieren
para ponerse a trabajar?
Cuando alguien empieza
en una actividad, ¿es un especialista desde el principio?
No,
él se convierte en un virtuoso con el tiempo a fuerza de ejercer esa actividad. Y así, hoy en día no son Adeptos, el próximo mes tampoco, pero algún día, si se
mantienen firmes, lo serán. Porque lo que importa es que comiencen a hacer
fluir el agua celeste a través de ustedes.
¿El río cavó su lecho con un sólo paso del agua?
No.
Le tomó varias pasadas, decenas, cientos de pasadas, para que el río se formara,
y los peces comenzarán a ser retenidos en sus aguas, permitiendo que los
hombres que construyeron un pueblo alrededor del rio, puedan alimentarse de los
peces.
Miren
lo que el agua celeste puede hacer por ustedes. Al enseñar a los demás, hacen
que el agua celeste fluya en ustedes y al mismo tiempo transmiten la Luz a
aquellos que están famélicos de comprensión. La Jerarquía lo percibe y los asiste
en su labor, y en agradecimiento los ayudan en vuestro propio desarrollo.
Si
en ustedes mismos desarrollan la responsabilidad de que son el lecho del río
celeste, el lecho del Espíritu Divino, entonces desde mañana mismo se inicia el proceso porque ya habrá dado sus frutos. Comenzarán
a hablar con una persona y a la semana siguiente con otra persona, y al cabo
de un tiempo, habrán llevado la Luz a muchas personas que sin su esfuerzo
seguiría en la oscuridad, en la ignorancia.
Obviamente
habrá dificultades. Hay los que escuchan y no aplican lo que escuchan, los que rechazan
lo que escuchan, y los que te miran como si estuvieras divagando. No importa,
el grano de Luz está sembrado, no todos despiertan tan rápidamente como
ustedes. Y también hay los exigentes, los que quieren información especializada
que sea esotérica, parapsicológica o religiosa. (Dímelo a mí…)
No
se preocupen por eso. Todo eso son detalles. Lo importante es que hayan sido el
primer alimento. No se preocupen por los detalles, su Padre celestial se ocupará
por ustedes y también los Maestros. En cambio, quiero
enseñarles a ustedes a ser universales, porque a menos de que tengan en su interior esa noción
de universalidad, no serán capaces de traer lo universal a la Tierra.
Lo que les
propongo es un mundo nuevo, más luminoso, más evolucionado, y para ello les
pido que sean los testimonios de ese mundo nuevo, no solo transmitiendo la Luz,
sino también siendo la manifestación y expresión de esa Luz en la Tierra.
Algunos
dirán:
-
“No es fácil, tengo defectos.”
A
lo cual te contesto:
-
“¿Qué te impide que te se deshagas de esos
defectos?”
Cuando
un individuo, sin importar quien sea, entra en un templo, él sacude su abrigo
antes de entrar, si éste se encuentra demasiado polvoriento, porque intuye que
no se debe entrar en un lugar sagrado con un abrigo sucio.
¿Qué simboliza el
gesto de sacudir su abrigo?
Es
tomar conciencia de nuestra interacción con lo sagrado. Es responsabilizarse de
uno mismo, viéndose con sinceridad y buscar a ser mejor cada día más. Entonces, examínense
como suelen hacerlo cuando examinan a las otras personas.
«
Bueno, esta noche, voy a hacer un balance de mi vida. ¿Qué he hecho hasta ahora
de bueno y de malo? ¿Qué he hecho
conscientemente? (Ya que no se los
considera culpables por lo hecho inconscientemente) ¿Que he estado haciendo en contra de las Leyes
Universales, en contra del Amor, en contra del Sendero, en contra de la Luz? »
Y
en ese punto no deben culparse y menos castigarse, sino simplemente ser adultos
y responsabilizarse con ustedes mismos, y conscientemente díganse:
«
Mira, desde hace años me has hecho hacer esta cosa, tú, mi parte emocional. Y
tú, mi parte carnal, ¡ni se diga! Llevas
años y años induciéndome a hacer otras cosas. Pero ahora ya soy grande, ya he
crecido espiritualmente y les digo que ya no seguiré sometiéndome a sus manías.
Declaro que esas cosas NO sucederán más y que a partir de ahora me tienen que
obedecer: tú, mi cuerpo físico, y tú, mi cuerpo emocional. »
Hacerse
responsables de la espiritualidad que vive en ustedes, es hacerla crecer: desarrollándola, deshaciéndose de lo que la impida expandirse y también dándosela a los demás.
Aquel
que tiene un gran campo siembra cuando el clima es cálido, luego recolecta y
guarda su cosecha en su bodega diciéndose: “esta es mi reserva”.
¿Pero qué sucede?
Un
día, el Señor envía un tornado y su reserva se pierde. Este es el mismo fenómeno
que sucede en ustedes. Si no dan el conocimiento que han adquirido, si no dan
la espiritualidad que han desarrollado, un día viene un suceso que los hace
dudar e incluso hasta repudiar sus conocimientos y su espiritualidad.
Puede
ser por ejemplo, una enfermedad que los aleje de la Luz y los vuelva a hacer caer en lo material y en lo cotidiano, o también puede ser una decepción, un
divorcio, un fallecimiento u otro evento que los sumerja como reacción en todo
lo que hay de más terrestre y astral.
Por lo tanto NO
pongan en su bodega interior lo que se encuentra en estado de germen sino que debe ser
rápidamente replantado para dar más alimento. No sean acaparadores con la Luz
del cielo, con la Verdad que les es dada. Sean el lecho del río, sean el
vehículo físico de vuestra propia divinidad y de la divinidad celeste. Sean
para los que todavía viven en la oscuridad, la manifestación de la Luz y de
todo lo divino que los compone y que los rodea.
4. SEAN
LOS PORTADORES DE LA FLAMA DIVINA, SENSIBILIZANDO A LAS PERSONAS SOBRE LAS
VERDADES ESPIRITUALES
Antes
de enviarlos sobre el camino de la sanación, debo decirles todo esto, porque si
quieren trabajar con nosotros, entonces no trabajarán de acuerdo con sus ideas,
sino de acuerdo con las Leyes divinas. Y la Ley del Amor dice que a pesar que
no les sea permitido curar a ciertas personas, sepan sembrar en ellas la Luz,
para que una vez que esas personas hayan saldado su karma, en su interior, en
su alma, la enfermedad no vuelva nunca más a afectarlas.
Así
es que más que sanadores, deben ser Apóstoles, y sólo siendo Apóstoles, podrán
ser verdaderos sanadores, porque el curandero que quita la pequeña verruga, que
sana la migraña, o que elimina el tumor, NO es un verdadero sanador, debido a
que no piensa primero en la Verdad y por lo tanto no soluciona verdaderamente
el problema en la persona.
Su
energía fue suficientemente fuerte para eliminar o atenuar la manifestación
física del problema. Pero en los cuerpos sutiles del paciente, si el origen del
padecimiento es energético o kármico, la causa no desaparece y más tarde o en
otra vida, la enfermedad volverá y probablemente aún más fuerte, porque ya fue
una primera vez experimentada y detenida.
Es
como si el curandero pusiera un tapón en el canal por donde desciende esa
energía nociva que causa la enfermedad. La acumulación de esa energía a nivel
sutil va a provocar cada vez más presión que en algún momento va a botar el
tapón del curandero y esa energía va a estrellarse sobre la parte física de la
persona provocándole un padecimiento aún más severo.
Y
déjenme decirles que hay muchos curanderos a los que nos gustaría quitarles su
poder porque hacen más mal que bien. (Pero los Maestros no lo hacen porque no
tienen derecho de intervenir, ya que los humanos disponen del libre albedrío.)
Entonces deben
saber hacer como lo hacemos nosotros. Así por ejemplo, no hay que exteriorizar el poder divino como si
fuera un espectáculo, sino como una fuerza para liberar. Por consiguiente y sin importar lo que
hagan para ayudar, se los reitero: háganlo en conexión con nosotros.
Y esto
no significa que para cada trabajo tendrán que hacer una larga meditación de
preparación. La conexión con nosotros es algo que tienen que desarrollar en
ustedes y sucederá muy rápido, precisamente porque nosotros también queremos
trabajar con ustedes, y por lo tanto nos aplicaremos para que desarrollen
rápidamente la intuición y la inspiración. Pero eso tan pronto como se hayan
decidido a ser primero Apóstoles modernos y no simples curanderos.
En cambio si
lo que quieren es trabajar con sus pequeñas técnicas para realizar las labores
que les interesan y poder sanar a las personas que les interesan, entonces no
hay necesidad de nosotros, no hay necesidad de ponerse en contacto, no hay
necesidad de ser un Apóstol, simplemente necesitan aplicar lo que ya saben. Pero si deciden trabajar con
nosotros, entonces es otra cosa, y no es más complicado, ni más exigente, simplemente es
trabajar respetando la Ley.
Así
es que resumiendo:
En
primer lugar, no construyan nada centrado sobre la piedra de base de lo que
podría ser un típico grupo de sanación.
En
segundo lugar, antes de comenzar a ejercer la sanación. Edifiquen primero la fraternidad y
tengan un comportamiento universal, de hermano a hermano. Y esta es la parte más
difícil. Pero si usted quiere trabajar con los Maestros y con Cristo, tiene que
tener una visión universal, porque es importante que entiendan que a través de
nuestro canal, van a utilizar una energía sagrada.
¿La van a derrochar
haciendo no importa qué o la van a utilizar haciendo las cosas bien?
Entonces,
antes de querer comenzar, lo más importante es hacer una introspección en
ustedes mismos y deshacerse de todas esas fantasías que tienen para así renacer
como discípulos conscientes y responsables adentro de la Jerarquía.
¿Es demasiado pesado,
se los pregunto?
Si
después de lo que acaban de escuchar, ya no se sienten tan entusiasmados y
consideran esa labor demasiado pesada, comprenderemos, y nadie de “aquí arriba”
(como ustedes dicen) se los reprochará, ni los tratará de débiles o pequeños. Créanme
que esos pensamientos están lejos de nosotros. Y sepan que seguiremos amándolos,
instruyéndolos y cuidándolos. Que estén con la tranquilidad que seguiremos
siendo los mismos, y es porque nosotros somos inalterables, tenemos una naturaleza
que es inmutable, porque nos comportamos en función de la Verdad y no del emocional.
Así
que para aquellos que se quedan, porque lo desean, porque quieren renacer, porque
quieren ser responsables en este mundo loco y en decadencia. Si uno solo de
ustedes se levanta, aunque sea débil, ignorante, inseguro, pecador, y diga:
«
Gran Hermano, yo acepto, yo no valgo gran cosa, pero aún así me ofrezco, y si
puedes lograr algún trabajo conmigo, mis respetos, porque serás el primero que
lo habrá logrado. »
(Risas
de la audiencia)
Entonces,
si uno solo de entre ustedes se levanta y acepta de volverse un Apóstol, el
trabajo se hará a través de él. Lo que importa es que estén con nosotros, que
trabajen en colaboración con nosotros. Pero para trabajar con nosotros, se
requiere que quieran volverse Apóstoles. Insisto. Y no hay que reflexionar toda
la noche como si se tratara de la gran pregunta filosófica del año:
¿Voy a ser o no voy
a ser un Apóstol moderno? “To be or not
to be.”
(Risas
de la audiencia)
Me
encanta cuando ríen. Si hay risas, ya es la fraternidad que comienza, porque el
amor no se instala que en la alegría. Tendrán obstáculos, es normal, pero
cuando vean a un hermano con un problema, vayan en su ayuda y háganlo reír para
que se relaje y se tranquilice, porque el amor puede fortalecer una fraternidad
y sólo en la alegría el amor puede nacer.
Es por eso que antes de querer ir a ayudar a los demás, primero deben ustedes mismos haber
resuelto sus problemas internos. Tener claro qué es lo que quieren y qué es lo
que ya no quieren ser. Y si han comprendido quien soy, sabrán inmediatamente cómo deben de ser y lo que tienen que hacer.
Se
los repito, yo no soy ni un sanador, ni un escritor, ni siquiera soy un redentor
del mundo, pero en cambio tengo el Poder y la Verdad, y cuando esos dos
aspectos de lo divino se activan por la acción de los hombres: crean un nuevo
mundo, porque si usted está de acuerdo con nosotros y la Ley, entonces es más
que la sanación lo que viene, es la semilla del nuevo mundo.
Por
lo tanto, centralicen su esfuerzo en hacer venir el nuevo mundo por la difusión
de la enseñanza y del fuego sagrado, porque quien dice Apóstol, dice también iniciador,
y quien dice iniciador, dice bautismo. Si pueden bautizar (en su sentido oculto) pueden verdaderamente sanar. En cambio alguien que no sabe bautizar no puede verdaderamente sanar. Es
imposible. Y ya expliqué la razón. Porque su energía va obstaculizar la
exteriorización de la enfermedad, pero el origen de la enfermedad seguirá
estando ahí. Ahora bien,
¿Qué es lo que
verdaderamente sana?
¿Es el hombre con
sus mil y un técnicas?
Porque
todo han inventado, desde instrumentos materiales muy sofisticados, hasta las
picaduras de abejas, pasando por los sonidos y colores. Todo está ahí. La gama
de terapias es muy amplia y sin embargo sólo hay un único sanador: el Espíritu
de Gracia. Solo hay él. Por lo que deben saber bautizar para poder sanar,
porque aquel que bautiza, da el espíritu, y sólo es el espíritu quien puede
sanar.
Por eso les pido que ante todo, sean Apóstoles, porque podrán bautizar y podrán realmente sanar. Y no me refiero a la pequeña curación física. Hablo de la verdadera liberación.
(Creo que ya comprendieron que por Apóstol, Pastor se refiere a ser como los discípulos de Jesús que siguieron transmitiendo la Luz, difundiendo el mensaje de Amor que dio Jesús. Y no como la iglesia lo ha deformado, de ser los propagandistas de una doctrina religiosa.
Predicadores hay muchos y la humanidad sigue igual de mal porque a esos individuos sólo les interesa aumentar el número de seguidores para su iglesia. No iluminar a la gente. Entonces ustedes sean como los primeros Apóstoles, sean Portadores de Luz, liberando a las personas de la ignorancia y de sus extremos: tanto del materialismo, como del dogmatismo religioso. Liberen a través de la palabra, a través de su experiencia con lo divino.)
Y
sobre la palabra “sanación” les voy a pedir que ya no la empleen, porque la
gente piensa no importa qué al respecto. Utilicen mejor la palabra “liberación”
porque en realidad eso es lo que ocurre. Cual sea la causa de la enfermedad o
del padecimiento, es la liberación que procura el Espíritu de Gracia del problema lo que realmente sana.
¿CÓMO EL HOMBRE SE
VUELVE LIBRE?
Se
vuelve libre porque es bendecido por la Gracia Divina. Se vuelve libre porque
comprende y su consciencia crece. Solo hay eso que da la libertad, la
verdadera, la libertad Cósmica. No la libertad de curar su pierna para poder
seguir jugando al futbol. No es esa libertad la que nos importa. (La verdadera
libertad la detallo en ¿Es el hombre libre? ¿Qué es la libertad?)
Naturalmente,
eso también es importante: poder curar a alguien que sufre físicamente, pero hay que saber cual
dolor es el menor.
¿Es que su alma
sufrirá menos cuando la enfermedad haya partido?
Os
lo digo, que a veces el alma sufre más...
5. LAS CAUSAS OCULTAS DE LOS ENFERMOS MENTALES
Hablas de
los enfermos mentales y de la Luz que debe dárseles. Pero es importante que sepas que las enfermedades llamadas mentales tienen diversos
orígenes. Ahora bien, para tratar
cualquier enfermedad, cual sea. Primero
hay que saber qué es lo que la causa a esa enfermedad. Cuando se manifiesta en la persona, los médicos dicen:
“es una enfermedad mental” o “es un cáncer de tal
tipo”. Pero saber lo que la
enfermedad es en su aspecto exterior no es suficiente. Si realmente quieren curar, tienen que
saber lo que ella es en su origen,
en su aspecto oculto, en el huevo
áurico, no en lo que
se va a manifestar en el plano físico.
- posesión de la persona por una entidad astral
- separación del alma de su personalidad
- una mala encarnación
- miedo enfermizo
Hay muchos enfermos mentales que en vez de un siquiatra,
lo que necesitan es un exorcista, ¿lo sabías?
SEPARACIÓN DEL ALMA
Cuando
el hombre desciende muy bajo en las vibraciones densas de la materia, por hundirse
en demasiada maldad, perversidad y depravación, el alma ya no soporta más la cohabitación con la vibración
nauseabunda de la personalidad y destruye el "puente" (el Antarkarana) que es el pequeño enlace energético
que permitía al alma (la parte divina de la persona) y a la personalidad (la
parte material de la persona) tener una historia de evolución juntas. El
individuo se vuelve un desalmado (un ser sin alma) y a mayor deterioro, se vuelve un
enfermo con demencia psiquiátrica severa.
MALA
ENCARNACIÓN
Es lo que sucede en algunos casos cuando el alma
humana rehúsa el cuerpo que se le asignó para reencarnar,
ya sea porque no quiere regresar a la Tierra, o porque le avanzaron con productos químicos el momento en que sería
normalmente su nacimiento. Lo que provoca que los datos astrológicos ya
no sean los adecuados y el alma ya no quiera de esa encarnación porque ya no
son los parámetros que le convienen para su evolución. Pero como ya se sumergió
bastante en la materia, la ley de la vida y la muerte la empuja hacia el mundo
físico, impidiéndole que regrese hacia el mundo sutil. Por lo que se encuentra
atorada entre dos mundos sin poder vivir bien ni en el uno ni en el otro, y la gente al no comprender eso dice que esa persona está loca.
MIEDO
ENFERMIZO
Hay otros que sólo
tienen problemas psicológicos severos. Si
conocieras lo nefasto que puede ser el miedo humano
lo comprenderías. Más de la mitad de los pacientes que actualmente los psiquiatras los consideran enfermos mentales, en realidad están enfermos de un miedo compulsivo. Y de hecho, se puede decir
que curar a los enfermos mentales consiste
principalmente en tratar con el miedo que hay en el mundo.
¿Cuál es la principal causa por la que un individuo
se vuelve un enfermo mental?
Hay personas que
nacen normales, que tienen un
desarrollo hasta cierta edad
normal, y de repente desvarían. Eso es
debido al miedo. Si supieras lo que es el miedo en el hombre, comprenderías lo que te quiero
decir. El miedo los hace jugar una tragicomedia, pero desafortunadamente se
involucran tanto en ella, que lo que nosotros llamamos “su computadora cerebral”
(que es pura lógica y análisis) ya no puede funcionar más según los parámetros que
le impone la personalidad sucumbida por el miedo y entonces se produce un corto
circuito.
Ya no hay contacto con la realidad. Y no es que su cerebro haya dejado de funcionar bien, sino que su cuerpo astral invadido completamente por el miedo enfermizo hizo corto circuito con lo que le permitía tener un contacto con la realidad física, esa realidad que ya no quiere saber más la persona porque se encuentra extremadamente atemorizada. Y en esos casos se requiere de una buena terapia.
Ya no hay contacto con la realidad. Y no es que su cerebro haya dejado de funcionar bien, sino que su cuerpo astral invadido completamente por el miedo enfermizo hizo corto circuito con lo que le permitía tener un contacto con la realidad física, esa realidad que ya no quiere saber más la persona porque se encuentra extremadamente atemorizada. Y en esos casos se requiere de una buena terapia.
Te aseguro que la
mayoría de los locos en la Tierra
no existirían si el hombre no
tuviera tanto miedo. El miedo enfermizo puede llegar a cualquier edad, a los dos, a los treinta o a los sesenta
años. La infancia, si conocieras el aspecto oculto de la infancia,
comprenderías porque el niño puede tener tanto miedo que termine por volverse
loco.
EL TEMOR EN LOS NIÑOS
El
bebé no es un ser semiconsciente como se cree generalmente. Al contrario, el
bebé está híper consciente del mundo. Mucho más que los adultos. No puede
hablar porque su cuerpo está tan nuevo que necesita volver a aprender a
controlarlo, pero con todo lo que su espíritu puede percibir, no necesita
estudiar para saber. Por ejemplo, ve a sus padres a nivel del aura, y sabe si
lo quieren o no. Muchos incluso se acuerdan de su encarnación anterior. Y es a
fuerza de adentrase cada vez más en la materia que compone su cuerpo, que el bebé se vuelve
cada vez más inconsciente de lo que él es como un alma en reencarnación, pero mientras que se mantenga por arriba
de la materia, es su consciencia espiritual la que percibe el mundo.
Por lo tanto, a
esa edad es toda una gama de temores
que pueden surgir. Y es por ello que el
niño debe de ser tratado con amabilidad,
tranquilizado y cierto, educado con firmeza, pero
también con amor, para que
justamente esos problemas no sucedan. Ya que esos miedos crean problemas en el
aura y también pueden crear enfermedades mentales, porque el niño se encuentra solamente integrado parcialmente en su
cuerpo. Los niños así parecen aletargados, sin ganas de nada, ni aprecio por
nadie. De vez en cuando entran plenamente en sus cuerpos y parecen despertar,
pero luego vuelven a salir. Y aunque estén vivos, no parecen estar vivos.
NO SE PUEDE REALMENTE
SANAR QUE TENIENDO UN PLENO CONOCIMIENTO DE LAS CAUSAS DE LA ENFERMEDAD
Hay tantas causas, que no se pueden utilizar diagnósticos
edificados por la medicina aunque esta sea especializada. Como lo mencioné
anteriormente, se necesita recurrir a la clarividencia o a la inspiración de un
guía sanador.
Ves por qué la
persona que se quiera dedicar a la sanación se enfrenta a un asunto de talla,
debido a que se confronta a su propia
ignorancia.
¿Lo comprendes
ahora?
6. CONSEJOS PARA LOS SANADORES
Para responder a tu pregunta:
No te voy a decir: “Sí, sí se puede sanar con la Luz”, ni tampoco te diré: “No, no se puede sanar con la Luz”. Lo que te respondo es que puedes sanar con la Luz, si la persona que está “enferma mentalmente” merece o necesita el tratamiento con la Luz.
¿Se puede curar a los enfermos mentales mediante la Luz?
No te voy a decir: “Sí, sí se puede sanar con la Luz”, ni tampoco te diré: “No, no se puede sanar con la Luz”. Lo que te respondo es que puedes sanar con la Luz, si la persona que está “enferma mentalmente” merece o necesita el tratamiento con la Luz.
Ahora bien, ¿cómo saber si la persona lo requiere?
Eso forma parte del talento del sanador. Y si esa es tu vocación, entonces entrénate, desarrolla su intuición y tu percepción extrasensorial (como lo llaman algunos). Desarrolla también en ti todo lo que puede dar acceso al mundo de la inspiración, y en particular a ti que me hiciste la pregunta te digo:
Debido a que tu concentración es grande, tu persistencia
fuerte y que tienes un cierto tipo de magnetismo muy activo. Utiliza esa energía que se encuentra ahí como potencial magnético, para formar
un enlace y así establecer un contacto sutil con nosotros.
APRENDER A PROTEGERSE
Afortunadamente tu magnetismo es fuerte, porque
de lo contrario no podrías repeler la energía nociva de tus pacientes, y tú también acabarías contaminado por sus enfermedades,
e incluso también ya estarías loco, ¿te das a cuenta?
(Eso es algo
muy importante que todos los sanadores energéticos
necesitan saber. Y es que antes
de querer sanar, primero deben aprender
a dirigir las energías y a saber protegerse. Porque de lo contrario, arriesgan absorber las vibraciones nocivas que producen la
enfermedad y enfermarse ellos también. Existen múltiples técnicas para protegerse.
Infórmense. Y vayan muy paulatinamente. Comiencen por sanar dolores de cabeza y
cosas sencillas, antes de querer tratar asuntos más graves como son los enfermos mentales.)
UTILIZACIÓN DEL PÉNDULO
Cuándo justamente se tiene ese tipo de magnetismo, ese tipo de fuerza, de concentración y de persistencia, lo mejor para hacer un diagnóstico es el péndulo. Así que aprende a trabajar con el péndulo.
Ahora bien, para poder trabajar eficazmente con
el péndulo se requiere que utilices un péndulo con el que sientas una gran afinidad. No importa si es un péndulo muy elaborado o
sencillo, si lo compraste o lo hiciste tú mismo. Lo importante es que te guste verdaderamente
(sino inconscientemente vas a generar cierta repulsión que va a afectar en la comunicación).
Aunque es un objeto de trabajo, actúa como el artesano que ama a sus herramientas, ya que con el péndulo es igual. Y por eso es importante que te sientas muy a gusto con tu péndulo para que puedas desarrollar cierta empatía con él, ya que se requiere que la comunicación sea real y que no tengas simplemente la impresión de estar sólo moviendo un pequeño objeto, sino que sientas que estás verdaderamente comunicándote con un ser.
Aunque es un objeto de trabajo, actúa como el artesano que ama a sus herramientas, ya que con el péndulo es igual. Y por eso es importante que te sientas muy a gusto con tu péndulo para que puedas desarrollar cierta empatía con él, ya que se requiere que la comunicación sea real y que no tengas simplemente la impresión de estar sólo moviendo un pequeño objeto, sino que sientas que estás verdaderamente comunicándote con un ser.
Obviamente,
no se trata de personificar al péndulo, sino de considerarlo como una vida. Y es porque si lo
consideras como una vida,
entonces vas a tener fe en él y su medio de percepción
va a ser enorme y podrás obtener muchas respuestas y otras cosas, ya que se pueden lograr muchas cosas con el
péndulo. Así por ejemplo puedes pedir una nueva técnica de meditación o de
sanación, etc.
PREGUNTAR A
LOS
MAESTROS DE SABIDURÍA
Y si quieres, nosotros podremos
también ayudarte. Puedes ponerte en sintonía con nosotros,
preguntarnos tus dudas y luego espera la
respuesta a través de tu péndulo. Lo que no significa
que tendrás la respuesta de inmediato, porque incluso si te enviamos la respuesta inmediatamente,
eso no significa que estarás en estado para recibirla, ya que tal vez no te encontrarás
en la condición vibratoria necesaria en ese momento para percibirla, debido a que trabajas mucho y tienes una vida ajetreada como los demás.
(La vida ajetreada, estresante y a veces
deprimente hace que las personas no se encuentren con la receptividad requerida
para captar la respuesta, entonces el pensamiento del Maestro espera que se den
las condiciones adecuadas para entrar en el aura de la persona.)
Por
lo tanto, tampoco seas impaciente, pero medita
en la pregunta, o en el enigma que tienes, ya que nosotros leemos en el hilo de todos los pensamientos. Y es porque para nosotros, sus pensamientos son un medio
para conocerlos y al mismo tiempo ayudarlos. Entonces cuando
nos preguntas algo o quieres saber algo y que te pones en la receptividad
intuitiva necesaria para tener la inspiración, la respuesta te llega. Puede que
sea por un movimiento del péndulo o incluso por una voz. Así que se paciente. Y cuando se den las condiciones, la respuesta llega.
(Recomiendan hacer un pequeño ritual antes de
hacer una pregunta, luego meditar en ella, solicitar la respuesta y olvidarse
del asunto, para no obstaculizar las energías.)
Es como si alguien
que tiene su sexto sentido en estado latente se dijera: "Yo sé
que tengo la capacidad de oír a los seres invisibles, así que desde mañana voy a escuchar." Pero las cosas no funcionan así, se necesita tiempo y dedicación para desarrollar el oído interno. Por lo tanto, tienes que ser
paciente y ejercitarlo, pero después,
ya con ese sentido desarrollado, tu voz interior te responderá
inmediatamente. Y es por esa razón que a dondequiera que
vaya, siempre les digo a las
personas que deben de practicar, practicar y practicar. Porque si practicas, te
vuelves un ser activo y te conviertes
en lo que aspiras.
IMPORTANCIA DE ESTAR
LIMPIO INTERIORMENTE
Sin embargo, mientras que el sanador no haya puesto todos sus cuerpos en un plano de armonía, no podrá hacer gran cosa. Y si lo hace, será en detrimento de su salud. Esto debido a que sólo podrá obtener la ayuda de seres del astral para efectuar sus sanaciones, ya que sus desequilibrios en su interior le impedirán que se sintonice a un nivel vibratorio superior (que es el plano mental). El problema es que si bien existen también entidades buenas en el astral, capaces de ayudarlo, siempre será en perjuicio de su energía vital.
Es por eso que hay tantos sanadores que se agotan y no pueden seguir llevando a cabo su actividad después de diez o quince años, y si persisten, terminan por morir. Porque las entidades que obran en el plano astral, necesitan de la energía vital para poder hacer algo, y para estos sanadores, ninguna ayuda les podemos proporcionar en ese aspecto porque sus desequilibrios internos impiden la sintonía con ellos. Por lo que es a ellos de comprender que toda su naturaleza debe ser primero armonizada y purificada antes de querer ser sanadores.
EL CONOCIMIENTO ES PRIMORDIAL PARA PODER SANAR
Para seguir respondiendo a tu pregunta, no es exactamente correcto decir que vas a curar a tus pacientes por la terapia de la Luz, porque cuando se cura con la Luz, hay que saber qué es lo que cura en la Luz. Y lo que cura es el hecho de enviar una vibración, que en la parte sutil del enfermo es lo equivalente a una descarga energética. Se trata de un tipo de electro-choque a un nivel etéreo. Y es por ello que ese fenómeno cura, no es por otra cosa.
Y es por ello que cuando me
presenté ante ustedes, no comencé a decir:
-
“Queridos intelectuales, todo lo que han aprendido es papel arrugado. Desde mañana tienen que orar todos los días, dar
todo lo que tienen, porque
el papel es
inútil.”
No. Al contrario, les dije
que el conocimiento era una de las
condiciones primordiales para entrar
en el Templo de la iniciación.
Hay muchos devotos y monjes que oran, pero eso no quiere decir que por ello entrarán en el Templo, aunque repitan miles y miles de mantras o de oraciones. Ya que mientras que no estén lo suficientemente instruidos
para que sean fiables, para que ejerzan algún rol de la Jerarquía en la Tierra, no entrarán en el Templo. Y justamente el conocimiento es una de las condiciones
para la entrada en el Templo iniciático.
Por lo tanto, sin importar lo que quieras hacer, hijo
desbordante, cálmate un poco y desarrolla lo que te dije.
(Por lo visto, el
sanador era muy exuberante y necesitaba desarrollar entre otras cosas la
paciencia.)
Si algunas veces estás ansioso por ver los
resultados,
no dejes que la ira y la duda te invadan. Rézanos,
no de manera religiosa, la cual
repudiamos, sino con profundidad, sinceridad y comunión, y ve a ver a tus hermanos, los que te puedan dar coraje, fe, confianza en ti mismo, y sigue ejercitándote.
El
camino de la vida es un camino de cruz, un camino de pruebas. A ti de decidir si esa
cruz debe ser construida de madera, y por consiguiente pertenecer a lo efímero para que desaparezca
cuando mueras, o si debe ser construida de luz para que ella se vuelva tu
consciencia cuando entres en el Cielo. Si elijes el camino de la cruz de
madera, continúa como lo has hecho hasta ahora, teniendo decepciones,
sufrimientos y diciéndote:
-
“Este mundo es una tortura Señor. ¿Por qué
nos has hecho nacer en un mundo tan duro?”
Pues bien, yo te respondo: vienes a este mundo porque se requiere que pases pruebas para asegurarse que en tu evolución hayas
desarrollado ciertas cualidades. Por consiguiente, no actúes de manera ignorante y haz de esa cruz, una cruz
de luz para que esta se vuelva tu corona y que ella también ilumine a los demás.
En su ignorancia,
el hombre cree que la prueba que él encuentra en su vida es una tortura, un castigo o un abandono que Dios hace a sus hijos. En su ignorancia, él no sabe que en realidad es la naturaleza, la Naturaleza
con una gran N, su único iniciador. La Naturaleza que con
la prueba viene a examinarlo, viene a purificarlo y viene a iniciarlo para que
justamente él pueda entrar en el Templo de la iniciación divina.
Sé que lo que esperabas era que te diera un
curso especializado sobre las sanaciones a través de la Luz, pero todo lo que podrás oír de mi boca son
palabras como éstas, porque como
te lo expliqué, la Luz no sana todo. Es tu inteligencia
y tu intuición las que van a curar, porque sabrán qué hacer. Ellas te dirán:
-
“Este lo que necesita es un exorcista. En cambio este sólo necesita una buena reprimenda y que
entre en un grupo de apoyo para darle confianza en el mundo y que se deshaga de
sus miedos. En cuanto a este, lo que necesita es la Gracia Divina para que su problema (ya sea kármico o ocurrido por
accidente) le sea retirado.”
Así que ya ves, las cosas no son tan simples como quisieras. En realidad, ellas son complicadas mientras que no se tenga acceso a la inteligencia divina. Pero tan pronto
como se tiene acceso a la
inteligencia divina, está resuelto, porque es la visión de
la Verdad.
Ahora bien, si haces
lo que te dije con el péndulo,
y si logras atraer a un espíritu sanador cerca de ti, entonces podrás hacer grandes cosas, porque el espíritu sanador estará activo y operacional. Pero se necesita que le abras las puertas a ese Espíritu sanador. Y si te quedas sólo con tu diagnóstico
y tu especialidad, no podrás abrirle la puerta, porque se
requiere que le ofrezcas tu conocimiento, como un material de base sublimizado
por su inteligencia divina, de modo que su colaboración contigo haga algo único en la
acción redentora.
¿Me
comprendes?
No todo Pastor. Lo último así como yo lo
comprendí, es que el Espíritu sanador va aportar la inteligencia divina que se
requiere para poder saber cuáles son las causas de la enfermedad y así poder
curar a la persona, pero necesita de alguien que le sirva de instrumento y que
pueda leer esa inteligencia divina y aplicarla en el plano físico, de ahí la
importancia que el sanador desarrolle su conocimiento, su intuición y su
capacidad de lidiar con las energías y las vibraciones superiores. Para dar una analogía, es como un
violinista que por muy talentoso que sea, si el violín está desafinado o maltrecho,
no podrá adecuadamente tocar con él. En este caso, el Espíritu sanado es el violinista y el sanador es el violín.
Quien
dirige la conferencia le dice en nombre de todos los oyentes:
-
“Muchas
gracias por lo que nos ha sido comunicado.”
A
lo cual Pastor responde:
Es
muy gentil de agradecerme, pero acuérdense que en el Templo nadie agradece. Los
miembros se aprecian, se sonríen, pero al único al que se le agradece es a
aquel que nos ha dado todo, o sea el VERDADERO MAESTRO.
Si
quieres agradecer a alguien, en la noche, en oración, agradece a tu alma y agradece
a Dios por ejemplo.
Buenas
noches tengan todos.
(Esta
petición de enviar la gratitud a Dios y no a ellos, la he visto también en
otros Maestros. Así el Mahatma Kuthumi en un mensaje que le envió a Annie
Besant, le dice:
«
Nosotros no pedimos que se nos venere. Deja que la devoción y el servicio sean
solamente para ese ESPÍRITU Supremo del que uno es una parte. »)